Durante estas últimas semanas, llenas de días y noches en las que el día siguiente era igual que el anterior y así sucesivamente, hemos estado con nuestros pequeños en casa. A veces, desesperados al no saber qué hacer, a veces deseosos de poder salir y, otras veces, nos hemos sentido afortunados de estar juntos pasando cosas difíciles que se acompañan mejor en familia.
A la vista de las últimas recomendaciones, a partir del domingo 26 podemos incorporar una nueva dinámica en nuestro “confinamiento”, pero que deberemos llevar a cabo con un alto nivel de responsabilidad: podemos incorporar un paseo por los alrededores de nuestro hogar con nuestros hijos. Todos estamos de acuerdo en que les va a venir bien, ¿verdad? Pero insistimos en que tiene que ser con la misma responsabilidad que hemos tenido en las anteriores semanas en las que no hemos salido de casa, esto es fundamental.
A la hora de llevar a cabo estas salidas, os recordamos que las indicaciones del Gobierno son las siguientes:
- Podrán salir niños entre 0 y 14 años acompañados por uno de sus progenitores o cuidadores habituales (hermanos mayores de edad por ejemplo), hasta un máximo de tres niños por adulto.
- Las salidas podrán ser de 9:00h a 21:00h, una vez al día y durante una hora, y, hacerse como máximo a un kilómetro de distancia de la vivienda. En zonas rurales se permite pasear por el campo, bosque, etc.
- En estos paseos sigue siendo obligatoria la distancia social, es decir, los niños no pueden juntarse con otros niños y familiares, ni hacer uso de parques infantiles o zonas comunes de urbanizaciones (que permanecerán cerrados por el momento).
- Se les permite correr, jugar y hacer ejercicio, así como salir con sus propios juguetes (bicicletas, patinetes, patines…).
- Aunque no es obligatorio el uso de guantes y mascarilla por parte de los niños y niñas, es aconsejable que los adultos velen por su higiene y lleven a cabo prácticas como lavarles las manos frecuentemente y evitar que toquen barandillas, pomos, etc., lavando sus manos tras cada posible contacto.
Incorporando estas indicaciones, podremos volver a disfrutar de las salidas con nuestros hijos e hijas, algo que seguro será muy atrayente para ellos y que les aportará un gran abanico de beneficios. Además, poder realizar pequeños paseos les ayudará a ir entrando en contacto con el exterior de manera progresiva y de vuestra mano, ir siendo conscientes poco a poco de todos los cambios que el Covid-19 ha traído a nuestro día a día.
Las salidas al exterior tienen grandes beneficios para los niños, en contacto con la luz natural y, en concreto del sol, les da el aporte de vitamina D necesario para desarrollar sus huesos, favoreciendo su crecimiento, su desarrollo cerebral y de su sistema inmune. Además, estar de nuevo en espacios abiertos y poder volver a mirar a distintas distancias, favorece el óptimo desarrollo de su visión.
¿Qué decir del movimiento? Imprescindible, imparable en nuestros hijos. Un niño que se construye está en continuo movimiento y estos paseos favorecerán que puedan satisfacer esta necesidad junto a nosotros.
¿Os imagináis ese primer paseo? Es importante que lo preparemos con ellos, que hablemos sobre la situación y verbalicemos aquello que es importante para nosotros y que queremos hacerles llegar. No se trata de llevarles en el carro o en brazos distraídos, sino que tenemos la responsabilidad de ir creando en ellos una conciencia sobre la situación actual y sobre las medidas que tendremos que llevar a cabo juntos.
Es probable que, aunque intentemos adaptar nuestro discurso a su nivel de edad, no comprendan ciertas consignas y tengamos que modificar un poco nuestros hábitos en pro de hacerles más fácil este tránsito. Como os decíamos anteriormente, lo principal es verbalizar la situación y transmitir calma y seguridad, ya que es probable que ante el bombardeo de información algunos niños lleguen a mostrar rechazo a salir de nuevo.
A la hora de preparar estos paseos deberemos ser precisos con ellos en cuanto a lo que va a suceder, para lo que os dejamos unas sugerencias sobre cómo abordar determinados temas:
- Dejarles claro que NO vamos a ir al parque. Además, en nuestro paseo evitaremos pasar por la puerta o cerca del parque ya que, por muchas explicaciones razonadas que les demos, ellos no tienen capacidad aún para comprender el alcance de la situación y es posible que se sucedan rabietas. Si esto sucediera, debemos ofrecerles nuestro amor incondicional y compasión, acompañarles en su disgusto para que, poco a poco, vayan integrando estas nuevas premisas en sus paseos diarios.
- Invitaremos a los niños a movilizar su cuerpo en estos paseos de diferentes maneras: podemos proponerles correr de la mano realizando pequeñas carreras, andar a la pata coja, pisar solo las baldosas de un color, encontrar charcos en los que saltar…
- Les trasladaremos la importancia de mantener una higiene antes, durante y después del paseo a través de NUESTRO EJEMPLO. Les haremos partícipes de la necesidad de lavarnos las manos, de emplear soluciones hidroalcohólicas, de no tocar barandillas, pomos, etc.
- En relación con esto, les explicaremos antes de salir que probablemente haya poca gente por la calle y, que la que encuentren, es muy probable que lleve guantes y mascarilla, que no se acerquen a saludarnos, etc.
Os recomendamos que os arméis de paciencia en estos primeros paseos, es mejor que al principio sean cortos y, a medida que vayamos viendo cómo los integran y se desenvuelven, vayamos aumentando el tiempo. En este sentido será muy importante RECOGER Y ACOGER todas las posibles emociones que los niños manifiesten durante estos momentos e intentar adaptarnos todos poco a poco a esta nueva situación.
Para ello, podéis emplear recursos como los cuentos ya que favorecen que los niños reconozcan en otros sus propias vivencias y emociones, así como ayudan a asentar hábitos y asimilar nuevas realidades. Podéis encontrar varios cuentos que trabajan los miedos, las emociones, así como nuevas historias que han surgido estos días para trasladar lo que está pasando a los más pequeños, como ROSA CONTRA EL VIRUS o EL MONSTRUO DE COLORES Y EL CORONAVIRUS.
Estamos seguros de que estos paseos comportan responsabilidad, pero supondrán bocanadas de aire fresco y un tiempo en familia para disfrutar. Porque cuando todo esto pase, ellos no recordarán la incertidumbre o el miedo, no recordarán cuántos días, ni porqué. Os recordarán a vosotros, los paseos, los juegos, los postres caseros y vuestra mano que les acompañaba en todo momento en esta nueva etapa.